Las bisagras de las puertas, aunque tengan poco protagonismo, representan un elemento imprescindible en el conjunto de las puertas ya que son las encargadas de soportar todo el peso además de darle el punto de apoyo necesario para que pivoten y puedan girar para su apertura adecuada. Asimismo, las bisagras cumplen también una función de seguridad evitando que entren desconocidos a través de la puerta de entrada.
Existen en el mercado diferentes tipos de bisagras para puertas que os indicamos a continuación.
Algunas de las bisagras más comunes son:
Bisagras de libro
Son las más conocidas y utilizadas ya que resultan muy fáciles de colocar. Consisten en dos hojas en metal que se atornillan a los cantos de la puerta. Son válidas tanto para apertura hacia izquierda como a derecha.
Bisagras desmontables
Son bisagras que no utilizan tornillos y constan de 2 partes que se unen por un pivotante. Se pueden desmontar.
Bisagras de piano o continuas
Son como las de libro pero, más largas. Se pueden acortar si se necesita una medida especial. Ideales para puertas abatibles.
Bisagras de pernio
Son más difíciles de instalar porque requieren de un cajeado previo, por los que necesitan de la mano de un profesional.
Bisagras decorativas
Son iguales que las de libro pero, con un diseño especial para personas que le dan gran importancia la estética.
Bisagras de doble acción
Se utilizan para para puertas de doble apertura, que se cierran solas. Tienen una instalación sencilla.
Goznes
Se utilizan en puertas de entrada o en pórticos.
Bisagras ocultas
Son utilizadas para tableros que desean abrirse como las hojas de un libro. Al estar ocultas con la puerta cerrada, son más estéticas que las habituales.
Un valor añadido en la puertas que cada vez más clientes nos solicitan, las bisagras ocultas, representan un complemento idóneo para realzar el diseño de la puerta que hayamos elegido al no presentar ningún herraje visible como sí ocurre con las bisagras tradicionales que habitualmente se instalan en la mayoría de puertas.
Además de las cuestiones estéticas y de diseño, que son muy importantes a tener en cuenta cuando nos decantamos por este sistema de bisagras ocultas, existen otra serie de características a tener en cuenta para decidirnos por su instalación. Entre ellas podemos destacar por ejemplo la gran amplitud de puerta que nos permiten las bisagras ocultas superando a la que nos permite una bisagra tradicional algo muy práctico en diferentes situaciones.
Otra cuestión técnica a destacar es la posibilidad que nos ofrece este tipo de bisagras para que podamos regular la puerta en 3 dimensiones. Mediante un sencillo sistema de ajuste de tornillos con una simple llave Allen, podremos regular la puerta en sentido vertical, horizontal y también en cuanto a profundidad pudiendo obtener un resultado óptimo de ajuste de la puerta con el cerco y evitar de esta manera desajustes poco estéticos, roces, etc…
Asimismo podemos destacar la gran funcionalidad que aportan las bisagras ocultas permitiendo la instalación de puertas de hasta 40 Kg de peso y pudiendo disfrutar de ellas en un periodo de hasta 200.000 ciclos de apertura, una gran durabilidad.
En definitiva las bisagras ocultas representan una mejora notable como complemento de las puertas en comparación con las bisagras tradicionales mejorando sustancialmente el conjunto del diseño de la puerta además de aportar facilidades técnicas que con las bisagras tradicionales no encontramos.
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